Prepara un exquisito mousse de toronja acompañado de una salsa de fresas

15 noviembre, 2019

La textura de los mousses es la característica que los convierte en uno de los postres favoritos de muchas personas; en esta oportunidad la cita es con una receta que combina el sabor de la toronja y lo dulce de las fresas, para darle forma a una exquisitez con la que consentir hasta el paladar más exigente. Acompáñenos hasta el final y anímese a prepararlo en casa.

Aprenda a preparar Mousse de toronja con salsa de fresas

Recetas para preparar mousse hay muchas, como la que planteamos a continuación ¡pocas! ¿Qué tiene de especial? la perfecta fusión de lo ácido de la toronja con la suave y dulce de las fresas; tome nota de los ingredientes:

  • 100 gr de azúcar
  • 4 yemas grandes
  • 170 ml de crema (nata) líquida
  • Dos cucharitas de Ron cucharadas
  • Dos cucharas grande de agua preferiblemente fría
  • Dos cucharas pequeñas de gelatina sin sabor
  • 250 ml de concentrado de jugo (zumo) de toronja
  • 1 cucharada de ralladura de toronja
  • 500 ml de crema (nata) líquida azucarada bien fría
  • Gajos de toronja para decorar

Ingredientes de la salsa:

  • 250 gr de fresas
  • 2 ½ cucharadas de azúcar
  • 2 cucharadas de licor de Cassis
  • Hojas de menta fresca o yerbabuena

Preparación:

En un bol apto para el fuego, deposite las yemas y el azúcar para batirlos – con ayuda de la batidora eléctrica – montados a Baño María hasta que espesen y se tornen blanquecino; aparte, hidrate en agua la gelatina y agregue en el bol junto al ron y la nata sin parar de batir el objetivo es que la gelatina quede integrada. Como resultado obtendrá una mezcla homogénea.

Baje de la fuente de calor e incorpore el zumo y la ralladura de la toronja, sin dejar de batir hasta conseguir una mezcla suave y equilibrada. Disponga el bol sobre otro recipiente lleno de hielo y agua fría, removiendo el preparado – proceso que se conoce como Baño María invertido –  sabrá que está listo cuando se espese un poco y su consistencia sea similar a la de la clara de huevo.

Aparte, tome un cuenco frío y bata la nata azucarada; una vez que la tenga bien montada, incorpórela con mucho cuidado a la mezcla anterior, este paso deberá hacerlo  manualmente con una paleta de madera para que no pierda el aire. Vacíe el resultado en un molde y llévelo a la nevera donde se refrigerará durante 24 horas.  

Para la salsa de fresa:

Lave las fresas y dispóngalas en un bol cómodo en el que hacerlas puré, adicione el azúcar y el licor, cuele a través de un colador de maya fina – o un tamiz – y refrigérelo hasta la hora de utilizarlo para decorar su mousse. Trascurridas las 24 horas, desmolde el postre y decore con la nata restante – que ya tendrá montada – los gajos de pomelo y las hojas de hierbabuena. Sirva bien fría acompañada de la salsa de fresas.